domingo, 11 de enero de 2015

Curso 2014-15. Crear presentaciones efectivas con Power Point (II)

Esta segunda entrada dedicada a las presentaciones se centra en el trabajo ante el público.

Presentarse ante un público no es fácil. Uno siempre nota un cierto nerviosismo sin importar cuántas veces lo haya hecho con antelación. La buena noticia es que aprendemos a controlar estos nervios con la práctica. Así que, cuanto más hablemos en público, menos nos costará.

En el caso de los adolescentes los nervios vienen principalmente del miedo al ridículo. Solo pensar en estar delante de los compañeros hace que nos empiecen a sudar las palmas de las manos, escalofríos recorren nuestro cuerpo y no acabamos de tener claro qué nudo es más desagradable, si el que se forma en nuestro estómago o el que atenaza nuestra garganta y nos impide decir algo  inteligible.

Seguro que eres capaz de reconocer todos o algunos de estos síntomas. Vamos a ver qué podemos hacer para mitigarlos y lograr que nuestras presentaciones dejen con la boca abierta a nuestro público.

  1. Hay que preparar bien la información. Tenemos que convertirnos en expertos en el tema que vamos a exponer, por lo tanto hay que hacer un buen trabajo previo. En la entrada Curso 2014-15. Crear presentaciones efectivas con Power Point (I) se trata el tema de la preparación del soporte informático. Esta parte lleva bastante trabajo, pero no es ni la mitad de lo que hay que hacer para lograr transmitir toda esa información a nuestro público.
  2. Ensaya varias veces antes de estar realmente ante el público. No se trata de memorizar el texto, sino de saber qué concepto o idea debes contar en cada momento. Los ensayos te darán seguridad. Una buena técnica es contar tu presentación ante tu colección de peluches o muñecos. Es un público que no dejará de mirarte con atención, pero que tampoco se ríe, hace ruidos o preguntas. Una vez lo tengas dominado puedes probar a hacer otro ensayo delante de un reducido grupo de personas de confianza: amigos, padres, compañeros, etc. Anímales a que tomen notas y al final te cuenten tus puntos fuertes y tus fallos. Es preferible que no te interrumpan a lo largo del ensayo.
  3. Una presentación no es un monólogo. El público en general es reticente a hablar con la persona que está presentando. Prefieren estar comodamente sentados y dejar que el tiempo pase. A medida que avanzamos conviene hacer preguntas al público. No tanto para comprobar si están atentos, sino para poder aclarar conceptos antes de avanzar más.
  4. Cuida tu imagen. El día de la presentación debes vestir de forma discreta. No se trata de aparecer disfrazado, sino de evitar que la ropa o los complementos que llevamos sean el foco de atención. Si el público se fija más en nuestro peinado, pendientes o vestido que en lo que tenemos que contar, va a ser muy difícil que logremos nuestro objetivo.
  5. Cuida tu lenguaje corporal. Debemos mostrar confianza y seguridad en nosotros mismos por eso hay que estar y moverse de una forma determinada y evitar algunas poses:
    1. Lo que NO debe hacerse. Cruzar brazos y o piernas, denota inseguridad. Llevar las manos en los bolsillos. Cruzar las manos a la espalda. Encorvarse. Hablar mirando al suelo. Hablar bajo, no te oyen bien desde el fondo y das imagen de inseguridad. Dar la espalda al público. Ser arrogante, esto supone un desafío al público y seguro que lo tendrás en contra.
    2. Lo que SÍ debe hacerse. Mirar a los ojos al público. Hablar con pasión y convicción (esto se consigue si dominas bien el tema). Sonreír, incluso si te hacen una pregunta que no sabes responder. Ser sincero, si no sabes algo dí que no lo sabes y que tratarás de averiguarlo. Contar anécdotas, si son graciosas, mejor, pero no hay que forzar un chiste. Las anécdotas hacen más creíble tu experiencia, el público valora muy bien lo auténtico.

Justo antes de salir a dar la presentación

  • Relájate. Haz algunos estiramientos, sobre todo de manos, brazos y cuello. Abre la boca, mueve la mandíbula y emite vocales largas, eso calentará tu garganta.
  • Haz respiraciones profundas. Uno de los síntomas del nerviosismo es que nuestra respiración se agita. Hacemos respiraciones cortas y superficiales. Para ayudar a la relajación haz inspiraciones profundas usando una respiración abdominal. Trata de seguir esta técnica también cuando estés ante el público.
  • Bebe agua. Solo unos sorbos. También podrás tener a mano una botella de agua durante la presentación.
  • Piensa en positivo. Proyecta en tu mente una imagen de ti mismo triunfando ante el público.
  • Ponte con los brazos en jarras o con los brazos en alto en la postura del ganador de una carrera. Esta conferencia de Amy Cuddy profundiza en el tema. Se pueden activar los subtítulos en castellano. Estar un par de minutos antes de empezar en estas posturas aumentará tu confianza en ti mismo.

A continuación os enlazo algunos vídeos para profundizar.

viernes, 9 de enero de 2015

Curso 2014-15. Crear presentaciones efectivas con Power Point (I)

Cuando se introduce en un buscador el título de esta entrada (sin la parte referente al título), se pueden encontrar miles de referencias, en particular documentos en diversos formatos, incluyendo presentaciones, y vídeos en los que se nos dan todo tipo de consejos y trucos.
Algunas de estas referencias se centran más en el acto de presentar, en la imagen que proyectamos ante el público, y como considero que esto es igualmente importante, voy a separar la información en dos partes.
En la primera parte se tratará estrictamente de cómo hacer una presentación atractiva en Power Point, mientras que la segunda parte se centrará en cómo estar ante el público.
Una presentación en Power Point es un medio de mostrar información, de modo que lo primero que hay que pensar es:

¿Qué es lo que vamos a presentar?

Dentro de este apartado hay que incluir:

Organiza la información

Crea un buen documento escrito, como un trabajo, con toda la información. Te servirá a la hora de estudiar el tema y preparar lo que vas a decir. Además, es posible que el profesor te pida que entregues el trabajo junto con el fichero de Power Point.

Lo segundo a tener en cuenta es que estaremos ante un público, y de estas personas dependerá el cuánto y el cómo desarrollemos las ideas o los datos, así que:

¿A quién va dirigida la presentación?

ATENCIÓN. Si vas a hacer una presentación ante tus compañeros de instituto ten en cuenta que ellos son el objetivo principal, pero no pierdas de vista que el profesor estará juzgando varios puntos: la información que proporcionas, el aspecto de tu presentación, el uso que hagas de efectos, colores, imágenes, etc., el soporte escrito, tu forma de estar ante el público y cómo te desenvuelvas ante las dudas y preguntas que te planteen.

La siguiente pregunta que debo responderme es:

¿Cuántas diapositivas incluyo?

Salvo que te hayan impuesto un límite en el número de diapositivas, puedes incluir todas las que necesites. Son gratis (excepto si vas a imprimirlas en papel). Debes tratar un único punto en cada diapositiva.

¿Cómo organizo mis diapositivas?

Cualquier presentación sigue unas reglas que voy a detallar a continuación:
Debe haber una portada. La primera diapositiva tiene que contener el título y otros datos de interés, como el nombre de los alumnos y el curso al que pertenecen.

A continuación hay que dar una visión general de lo que se va a tratar. Eso centra al público y le permite hacerse una idea global. Se puede optar por un índice escrito o gráfico. Una buena idea sería emplear un mapa mental.

Hipervínculos
Puedes crear hipervínculos desde el índice hasta distintas diapositivas y viceversa. Si te conviene, también puedes enlazar entre sí diapositivas que no aparecen en el índice. Esto agiliza el volver a mirar información que se había expuesto con anterioridad y regresar rapidamente al punto de partida.

Una regla muy importante es limitar el texto que aparece en cada diapositiva. Incluyendo un eventual título de apartado, el número de líneas de texto en cada diapositiva no debería superar las cuatro. Esto también se aplica para el índice, por lo que si el índice se extiende a lo largo de varias diapositivas, piensa en algún modo de hacerlo más general y breve.

Incluye la información del trabajo escrito en el apartado de notas de las diapositivas adecuadas. Eso te ayudará a la hora de ensayar la exposición a saber qué decir en cada momento.

Aspectos estéticos
El fondo de las diapositivas puede ser fotografías, texturas, patrones o figuras creados para la presentación. Trata de escoger un tema y un esquema de colores relacionado que aporten equilibrio a lo que estás exponiendo. Los colores pueden modificar el ánimo de los espectadores, así que hay que ser cuidadoso al escogerlos. Puedes encontrar más información sobre los esquemas de colores, herramientas para trabajar con ellos y una aplicación online (centrada en elementos del hogar)  pinchando en los enlaces. También pueden resultarte útil Adobe Kuler o Design Seeds.
En el caso de usar fotografías, escoge las que tengan la suficiente resolución como para que se vean con nitidez, pero que no sean de tan alta resolución que tarden mucho en cargar. Recurrir a herramientas como Compfight te puede ayudar a localizar las imágenes que necesitas.

Tipografías. Tienes que tener en cuenta que si va a aparecer texto encima de tu esquema de colores o de fotografías debe ser legible. Esto se consigue con un tamaño adecuado y con un color de fuente que contraste bien con el fondo. También puedes emplear tipografías que ayuden a leer con comodidad la información. Visita Font Squirrel, MyFonts u otro lugar donde haya tipografías libres y gratuitas para descargar. Prueba con Pacífico, Lobster, o alguna otra tipografía divertida. Ten en cuenta al descargarla si dispone de los caracteres necesarios en español: la ñ y las vocales con tildes.
No uses más de tres tamaños distintos a lo largo de la presentación y haz un uso cuidadoso de negrita, cursiva y subrayado, no debes abusar de ellos.